Hablamos con Mar Viqueira, directora de Cáritas Interparroquial de Arousa desde el pasado 2021, que nos cuenta cuál es su labor y qué servicios ofrece esta entidad para las personas que más lo necesitan.

¿Hace cuánto comenzó su actividad Cáritas Interparroquial de Arousa?

Hace aproximadamente 40 años que Cáritas Interparroquial de Arousa comenzó su actividad en Vilagarcía. Lo hizo para ayudar a enfermos del sida, en una época en la que había muchos jóvenes metidos en la droga. Fue alrededor de cinco años más tarde cuando se puso en marcha el comedor social, que todavía sigue en funcionamiento hoy en día.

¿Cómo llegan hasta vosotros las personas que solicitan vuestra ayuda?

La personas las derivan las 27 parroquias que colaboran con Cáritas, así como de los servicios sociales del ayuntamiento, de Cáritas de otras ciudades si sus usuarios vienen a Vilagarcía y de Cruz Roja. Es la trabajadora social quien se encarga de recibirlas, les hace una entrevista y se detectan sus necesidades para derivarlas a los servicios correspondientes.

¿Cuáles son los servicios que ofrecéis?

Uno de los principales es el comedor social, en el que ofrecemos desayunos y comidas todos los días. Antes de la pandemia también abríamos para las cenas, pero ahora les damos una bolsa al mediodía. Además, contamos con el comedor sobre ruedas, con el que atendemos a personas que no pueden desplazarse y no tienen recursos. Les llevamos la comida de lunes a sábado y aprovechamos para acompañarlas y hacer un seguimiento continuo de su situación.

Otro de los servicios es el ropero. Está atendido por voluntarios, que clasifican la ropa y atienden a las personas que van. Mantas, ropa de abrigo, calzado, gorro, ropa de niños, etc. Contamos también con el servicio de formación y empleo, con el que se busca la inserción laboral de personas con dificultades para que puedan tener autonomía y capacidad económica en el futuro. Por último, está la casa de acogida de San Cibrán, que cuenta con 14 plazas. En ella acogemos personas sin hogar que quieren una vida mejor. Les enseñamos valores, a gestionarse y les acompañamos en el camino para que a su salida puedan llegar a tener una independencia.

¿Cuál ha sido la evolución de la entidad?

En 2020 contábamos con 189 personas voluntarias y hubo 1.315 personas beneficiarias de los servicios de Cáritas de Arousa. Por poner un ejemplo, el comedor sobre ruedas contó con 18 participantes, mientras que alrededor de 80 personas hicieron uso del ropero y en el servicio de Atención primaria, es decir, la puerta de entrada a Cáritas, se realizaron alrededor de 12.000 intervenciones de acogida, orientación y escucha.

¿Cuál es la situación actual?

La situación actual es desesperante. Estamos viviendo una crisis social y económica que afecta a muchas personas. Sube el precio de los suministros, de la alimentación, de los alquileres, etc. ¿Qué haces si estás ayudando a personas a que tengan una vida digna y se encuentran con la barrera del alquiler? Estas últimas semanas visitamos las parroquias y estamos detectando un aumento importante de necesidades.

¿Qué objetivos tenéis para el futuro?

Ojalá llegue un día que no tuviéramos que existir. Pero, ahora mismo, hacen falta voluntarios. Ya tenemos muchas manos y estamos muy agradecidos, pero hacen falta más. La mayoría suelen ser jubilados, pero no es necesario serlo y contar con mucho tiempo. Cualquier granito de arena hace muchísimo.