Logo de la empresa

La primera banda de música de Vilagarcía

Redacción revista eSmás | revista eSmás Vilagarcía Nº40 Primavera 2023

Historia de cómo comenzó la primera banda de música de Vilagarcía.
La primera banda de música de Vilagarcía

 

No es secreto alguno que al igual que la región valenciana, Galicia es tierra de bandas y fue a principios del siglo XIX cuando empiezan a fundarse bandas musicales en Galicia.

Fue probablemente la de Merza la que en 1828 inició la serie de bandas que poco a poco fueron surgiendo. Lo que si es seguro en cuanto a la fecha, es que la banda de Rivadavia se fundó en 1840. Después fueron surgiendo otras, tales como, la de Villarubín- Peroxo (Ourense) que surgió en 1850; la de Cira en Silleda; la de Santiago de Compostela; la de Cerdedo en 1851; Mezquita en Ourense y otras más en la década de 1850 a 1860.

En Vilagarcía habrá que esperar a 1873 para que se funde la primera banda de música, pero no fue municipal, sino la banda de una organización paramilitar llamada “Milicia Nacional” que los gobiernos ponían en funcionamiento de acuerdo con la situación política o militar de las provincias, tal como por ejemplo, la lucha contra las guerrillas carlistas, que al igual que en el restos de España, luchaban también en Galicia, pero con menos intensidad que otras zonas del norte y del nordeste español.

Será pues en 1873 cuando tras proclamarse la Primera República Española, se notificó al alcalde Bargés la formación en Vilagarcía de los llamados “Voluntarios de la República” integrada por unos 300 hombres, ordenando que“ continúen los retenes y patrullas de vecinos armados y los marineros de la trincadura “Jacoba” de los que el digno comandante dispuso su bajada a tierra para que se conserve el orden afianzando la libertad de los habitantes del distrito”.

Mientras ocurrían estos sucesos, el teniente de alcalde, Mora y Spínola, tiene la feliz idea de exponer al resto de los concejales que se constituyera una “Academia de Música” que sería el germen de la futura primera banda de música de Vilagarcía. La exposición que hizo al resto de los concejales fue la siguiente:

“Amante la municipalidad de la instrucción pública, del progreso de la villa y de los adelantos y mejoras de los pueblos, ha de servir fijar su atención, en la conveniencia de establecer bajo sus auspicios, una academia, en la que deberán de recibir la enseñanza de la música, los muchos mozos que desean su estudio. Se pretende establecer una Academia de Música, que después de ofrecer grandes ventajas económicas, proporcionara solaz al vecindario y atraerá la concurrencia de otras poblaciones”.

Para ello, se ofrecía como voluntario el maestro José Tizón, para ofrecer clases gratuitas. Añadía que los músicos de la banda no cobrarían nada hasta que se hubiera satisfecho el costo de los instrumentos, pero además, el Ayuntamiento ahorraría cada años unas 250 o 300 pesetas que es los costaban las bandas de Rianxo y Padrón, que eran las que venían a Vilagarcía en sus fiestas.

La Academia estaría formada por las siguientes personas: José Tizón que sería el director además de tocar el fiscor- nio; Joaquín Rubianes que aprendería a tocar la flauta; Francisco Durán el requinto; Lorenzo Castro y Antonio Diéguez los cornetines; Baldomero Piñeiro y Ramón Soto los trombones; Luis Rodríguez y Jesús Currás los fiscornios; Luis Picón y Francisco Millán los bombardinos, y Pablo Berdullas y Salvador Durán las tubas.

En principio, sería el Ayuntamiento quien pagara los instrumentos, y los alumnos indicados pagarían posteriormente dicho costo. Se establecía además, que la banda una vez formada, tocaría gratis en las procesiones de Semana Santa, Pascua y Corpus, y la retribución del director, será la cuarta parte íntegra de la utilidad de cada función o acto. Cuando en cualquier función se pretenda que haya mayor número de músicos de los de la academia, el director admitirá con preferencia a los familiares de los asociados; Cuando sea preciso el ruido de tambor, bombo o platillos se satisfarán por la Academia; De haber algún cambio para el pago de los instrumentos, según su costo, al rematar cada uno su desempeño, percibirá sus de la asociación. al completo, pero no se releva de la obligación de continuar perteneciendo a la Academia y tocar gratis para el Ayuntamiento, mientras no se le solvente de todo, a no ser por ausencia, enfermedad u otra causa justa, y en tal caso, perderá lo que entregara a cuenta del costo del instrumento, devolviendo y abonando su desperfecto el individuo que se separe de la asociación; la falta de cumplimiento de cualquiera de las causas previstas, será corregida con una multa de una a cinco pesetas; el importe de estas multas constituirá un fondo especial con destino a gastos generales de la asociación.

Pasados cinco meses de estudios de solfeo, Cayetano Pumariño en representación de la llamada “Comisión Filarmónica” encargada de la supervisión de la Academia y de los acuerdos anteriores, informa el día 29 de noviembre de 1873 al ayuntamiento, “que los mozos que componen la Academia de Música dirigida por el Sr. Tizón, se encuentran muy adelantados en el solfeo y en disposición de empezar a estudiar el uso de los instrumentos”. La primera actuación oficial de la banda de música debió ser en la procesión de Semana Santa del año 1874, y se dijo por entonces “que la ropa que llevaban los músicos desentonaba un poco, por lo que hubo que invertir 1.054 pesetas en uniformes para los mismos”. Pasados algunos años, en 1879 se decide por parte del Ayuntamiento.

Que “para el buen régimen de la banda de música, se nombre una comisión compuesta por Manuel Carús y el secretario del ayuntamiento, a los que se faculta para entender y disponer todo cuanto se refiera a la citada banda”.

El número de músicos de la banda debió de ir en aumento de acuerdo con las actas de los plenos municipales para la adquisición de nuevos instrumentos tal como el 19 de julio de 1879 en que se dispone el pago de 305 pesetas para la compra de tres nuevos instrumentos.

En 1879 debió de haber problemas con la dirección de la banda, ya que aparece Victor González como nuevo director, para el año siguiente ser despedido para volver José Tizón a cargo de la banda.

Fotografías cedidas por Juan Carlos Porto.


Anunciantes en el número actual la revista eSmás:


Scroll to Top