Desde tiempos remostos el caballo ha estado en cada rincón del planeta, sirviendo al instinto expedicionario humano. Este fiel animal, además de medio de transporte y ayudar en las tareas del campo, se ha acabado convirtiendo en el protagonista de una práctica deportiva como es la equitación. Resulta curioso que, pese al avance de las nuevas tecnologías especialmente en los últimos años o la naturaleza humana cada vez más urbana, el interés por esta práctica no haya descendido, sino que se haya mantenido e incluso reforzado: la demanda de rutas a caballo a través de los bosques y senderos de Galicia ha ido aumentando significativamente.
Beneficios demostrados
El binomio jinete-caballo ayuda a recuperar el contacto con la naturaleza y a sentir mayor alivio y descanso. Esto se consigue al apartar por unas horas las preocupaciones, exigencias y adversidades de la vida cotidiana sustituyéndolas por un ambiente natural y tranquilo, donde no existe la prisa. Cabe destacar también el papel que juega este animal por medio de la equinoterapia. Estas experiencias terapéuticas contribuyen a mejorar la rehabilitación de los niños y adultos con necesidades especiales. Después de varias sesiones de contacto con los animales, los resultados son espectaculares, con manifiestas mejorías tanto físicas como psicológicas en los pacientes.
Verde que te quiero verde
Las rutas a caballo en Galicia son una forma muy atractiva de contemplar nuestros maravillosos paisajes y adentrarnos en la naturaleza cautivadora y hermosa. Los frondosos bosques son sinónimo de aire puro, fragancias frescas y naturales, agradable sombra y un hipnótico paisaje rico en colores. Un agradable paseo a caballo fomenta el amor por la naturaleza y por los animales, además de desarrollar la intuición y la coordinación corporal.
Los bosques en Brión
Una de las zonas más demandadas para las rutas a caballo es la zona de Brión, situado en dirección Noia, al oeste de Santiago de Compostela (a tan solo 15 minutos de la capital gallega). En este entorno rural encontrarás un amplio abanico de rutas cuidadosamente seleccionadas, rodeadas de bosques, prados y sendas alejadas del bullicio de la ciudad, donde podrás sentir el olor de la naturaleza.
Patrimonio histórico y cultural
Las excursiones son de distinta duración, ya que existen modalidades de la una a las cuatro horas e incluso otra a jornada completa. Durante ese tiempo nos adentraremos en bosques, ríos, montes, aldeas... Descubriendo los lugares más recóndito imaginables.
Las rutas más cortas se centran en los bosques de la zona. Podremos disfrutar del maravilloso paisaje verde que nos ofrecen, descubriendo especies de flora autóctona. En las más completas se podrán conocer, además, lugares históricos que nos transportarán a épocas y escenarios fáciles de imaginar encima de nuestra montura.
Uno de ellos son las Torres de Altamira, restos de la noble e impresionante atalaya que dominaba el valle de Mahía. Estas ruinas pertenecen a una antigua fortaleza cuya construcción data del sigo IX y fue escenario de numerosas luchas entre el clero y la nobleza. Este castillo medieval ahora en ruinas fue propiedad de la poderosa familia Moscoso, la cual jugó un papel destacado en Galicia en la Edad Media. Actualmente las torres han sido declaradas bien de interés cultural.
Fundamental: seguridad garantizada
Para mayor seguridad todas las rutas están guiadas por un monitor experimentado y altamente cualificado, que se encargará de atender las distintas necesidades del grupo, adaptándose a la experiencia y habilidades de cada uno para que la ruta se desarrolle con total seguridad los jinetes puedan disfrutar al máximo.
Es frecuente que, después de haber experimentado uno de estos paseos a caballo, crezca nuestro interés por esta actividad. Por ello, son muchos los que deciden aprender o perfeccionar la técnica por medio de clases de equitación que tienen como objetivo poner en conocimiento del alumno las diferentes disciplinas.